Sangre en la orina (hematuria)
Muchas cosas pueden causar orina con sangre. Algunas son graves y otras son inofensivas. Averigua por qué siempre es importante hacerse un chequeo.
Perspectiva general
Ver sangre en la orina, también llamado hematuria, puede generar temor. En muchos casos, la causa es inofensiva. Sin embargo, la sangre en la orina puede ser un signo de una enfermedad grave.
Si puedes ver la sangre, se llama hematuria macroscópica. Si la sangre no se ve a simple vista, se llama hematuria microscópica. Es una cantidad tan pequeña que solo se ve bajo un microscopio cuando se analiza la orina en un laboratorio. En ambos casos, es importante determinar la causa del sangrado.
El tratamiento depende de la causa.
Síntomas
La presencia de sangre en la orina puede hacer que se vea rosada, roja o amarronada. Los glóbulos rojos provocan el cambio de color en la orina. Solo se necesita una pequeña cantidad de sangre para que la orina se vuelva roja.
El sangrado no suele ser doloroso, pero puedes sentir dolor si hay coágulos sanguíneos en la orina.
Cuándo consultar al médico
Consulta con el proveedor de atención médica siempre que notes que la orina parece tener sangre.
La orina de color rojo no siempre se debe a la presencia de glóbulos rojos. Algunos medicamentos pueden hacer que la orina se vuelva roja, como la fenazopiridina, que alivia los síntomas de malestar en las vías urinarias. Algunos alimentos, como la remolacha y el ruibarbo, también pueden hacer que la orina se vuelva roja.
Puede ser difícil saber si un cambio en el color de la orina se debe a la presencia de sangre. Por eso siempre es conveniente hacerse una revisión médica.
Causas
Esta afección se produce cuando los riñones u otras partes de las vías urinarias dejan permiten que las células sanguíneas se filtren en la orina. Entre los diferentes problemas que pueden causar esta fuga se incluyen los siguientes:
- Infecciones de las vías urinarias. Se producen cuando las bacterias ingresan en el conducto por el que la orina sale del cuerpo, o uretra. Luego las bacterias se multiplican en la vejiga. Las infecciones de las vías urinarias pueden provocar sangrado que hace que la orina tenga un aspecto rojo, rosa o marrón. También pueden hacer que tengas unas ganas intensas de orinar que duran mucho tiempo. Puedes sentir dolor y ardor cuando orinas. La orina también puede tener un olor muy fuerte.
- Infección renal. Este tipo de infección de las vías urinarias se llama pielonefritis. Las infecciones renales pueden producirse cuando las bacterias ingresan a los riñones desde el torrente sanguíneo. Las infecciones también pueden producirse cuando las bacterias se desplazan a los riñones desde un par de conductos que conectan los riñones con la vejiga, denominados uréteres. Las infecciones renales pueden causar los mismos síntomas relacionados con la orina que otras infecciones de las vías urinarias. Pero es más probable que causen fiebre y dolor en la espalda, el costado o la ingle.
-
Cálculo en la vejiga o en el riñón. Los minerales de la orina pueden formar cristales en las paredes de los riñones o la vejiga. Con el tiempo, los cristales se pueden trasformar en cálculos (piedras) pequeños y duros.
Los cálculos suelen ser indoloros, pero pueden hacer mucho daño si provocan una obstrucción o salen del cuerpo a través de la orina. Los cálculos en la vejiga o en los riñones pueden provocar sangre en la orina que se aprecia a simple vista, así como sangrado que solo puede verse en el laboratorio.
- Agrandamiento de la próstata. La glándula prostática se encuentra justo debajo de la vejiga y rodea la parte superior de la uretra. Suele aumentar de tamaño hacia la mediana edad. Entonces ejerce presión sobre la uretra y bloquea parcialmente el flujo de orina. El agrandamiento de la próstata puede provocar problemas para orinar, una necesidad urgente o persistente de orinar, o sangre en la orina. La infección de próstata, llamada prostatitis, puede provocar los mismos síntomas.
-
Enfermedad renal. La presencia de sangre en la orina que solo puede verse en el laboratorio es un síntoma común de una enfermedad renal llamada glomerulonefritis. Con esta enfermedad, se inflaman los filtros diminutos de los riñones que eliminan los desechos de la sangre.
La glomerulonefritis puede formar parte de una afección que afecta a todo el organismo, como la diabetes. O bien, puede ocurrir por sí sola.
- Cáncer. La presencia de sangre en la orina perceptible a simple vista puede ser un signo de cáncer avanzado de riñón, vejiga o próstata. Estos tipos de cáncer podrían no causar síntomas antes, cuando los tratamientos podrían funcionar mejor.
- Enfermedades hereditarias. Una afección genética que provoca efectos en los glóbulos rojos, denominada anemia de células falciformes, puede causar sangre en la orina. Las células sanguíneas pueden ser visibles o demasiado pequeñas como para poder verlas. Una afección que daña los vasos sanguíneos diminutos de los riñones, denominada síndrome de Alport, también puede provocar sangre en la orina.
- Lesión renal. Si sufres un golpe u otra lesión en los riñones por un accidente o por practicar un deporte de contacto, es posible que veas sangre en la orina.
- Medicamentos. El medicamento contra el cáncer ciclofosfamida (Cytoxan) y el antibiótico penicilina están relacionados con la presencia de sangre en la orina. Los medicamentos que previenen la formación de coágulos sanguíneos también están relacionados con la presencia de sangre en la orina. Entre ellos se encuentran los medicamentos que impiden que las células sanguíneas, llamadas plaquetas, se adhieran entre sí, como el analgésico, aspirina. Los medicamentos que diluyen la sangre, como la heparina, también pueden ser una causa.
-
Ejercicio intenso. La sangre en la orina puede aparecer después de practicar deportes de contacto, como el fútbol. Puede estar relacionada con daños en la vejiga causados por golpes. La sangre en la orina también puede aparecer cuando se practican deportes de larga distancia, como las carreras de maratón, pero no el motivo no es tan claro. Puede estar relacionada con daños en la vejiga u otros motivos que no implican una lesión. Cuando el ejercicio intenso provoca sangre en la orina, esta puede desaparecer por sí sola en una semana.
Si ves sangre en la orina después de hacer ejercicio, no des por sentado que se debe al ejercicio. Consulta al proveedor de atención médica.
A menudo, se desconoce la causa de la hematuria.
Factores de riesgo
Casi todas las personas pueden tener glóbulos rojos en la orina, incluidos los niños y adolescentes. Algunas cosas que pueden aumentar el riesgo de sangre en la orina incluyen las siguientes:
- Edad. Los hombres de mediana edad y mayores pueden tener más probabilidades de sufrir hematuria debido al agrandamiento de la próstata. El riesgo de algunos tipos de cáncer que pueden provocar sangre en la orina también puede aumentar a partir de los 50 años.
- Infección de las vías urinarias. Esta es una de las principales causas de la presencia de sangre en la orina de los niños.
- Antecedentes familiares. Las probabilidades de tener sangre en la orina pueden aumentar si uno o más familiares han tenido una enfermedad renal.
- Ciertos medicamentos. Algunos analgésicos, anticoagulantes y antibióticos pueden aumentar el riesgo de sangre en la orina.
- Ejercicio intenso. Uno de los apodos para la hematuria es hematuria del corredor de maratones. Los deportes de contacto también pueden aumentar el riesgo.
Diagnóstico
Estas pruebas y exámenes desempeñan un papel fundamental en la búsqueda de la causa de la presencia de sangre en la orina:
- Examen físico. Esto incluye hablar con un proveedor de atención médica sobre tu historial médico.
- Análisis de orina. Pueden utilizarse para diagnosticar la presencia de sangre en la orina. También pueden utilizarse semanas o meses después para ver si la orina sigue conteniendo sangre. Los análisis de orina también pueden verificar la existencia de una infección de las vías urinarias o la presencia de minerales que causan cálculos renales.
- Pruebas por imágenes. A menudo es necesario hacer una prueba por imágenes para encontrar la causa de la presencia de sangre en la orina. Puede que debas hacerte una tomografía computarizada, una resonancia magnética o una ecografía.
- Cistoscopia. El proveedor de atención médica introduce en la vejiga una sonda estrecha provista de una pequeña cámara para buscar signos de enfermedad.
En ocasiones, la causa de la presencia de sangre en la orina no puede identificarse. En ese caso, es posible que necesites pruebas de seguimiento periódicas, sobre todo si tienes factores de riesgo de cáncer de vejiga. Estos factores de riesgo incluyen fumar, radioterapia en la pelvis o exposición a determinadas sustancias químicas.
Tratamiento
El tratamiento para cuando hay sangre en la orina depende de la causa. Este tratamiento puede implicar lo siguiente:
- Tomar medicamentos antibióticos para eliminar una infección de las vías urinarias.
- Probar un medicamento con receta médica para reducir el agrandamiento de la próstata.
- Hacer un tratamiento con ondas sonoras para eliminar piedras en los riñones o la vejiga.
En algunos casos, no se necesita tratamiento.
Si recibes tratamiento, consulta al proveedor de atención médica después de recibirlo para garantizar que ya no haya sangre en la orina.
Preparación antes de la cita
Puedes empezar por pedir una cita con tu proveedor de atención médica habitual. O puede que te remitan a un médico especializado en trastornos de las vías urinarias, llamado urólogo.
A continuación encontrarás información que te ayudará a prepararte para tu cita médica.
Qué puedes hacer
Prepara una lista de lo siguiente:
- Tus síntomas. Incluye cualquier síntoma, incluso los que no parezcan estar relacionados con el motivo de la revisión. Anota también cuándo comenzaron los síntomas.
- Información médica clave. Esto incluye otras afecciones por las que te estén tratando. Anota también si alguien en tu familia ha tenido enfermedades renales o de la vejiga.
- Todos los medicamentos, las vitaminas u otros suplementos que tomes. Incluye las dosis de cada uno, es decir, la cantidad que tomas.
- Preguntas para hacerle al proveedor de atención médica.
Algunas preguntas para hacer sobre la presencia de sangre en la orina incluyen las siguientes:
- ¿Cuál podría ser la causa de mis síntomas?
- ¿Qué pruebas necesito?
- ¿Cuánto puede durar esta afección?
- ¿Cuáles son mis opciones de tratamiento?
- Tengo otros problemas de salud. ¿Cuál es la mejor manera de controlarlos de manera conjunta?
- ¿Hay algún folleto u otro material impreso que pueda llevarme? ¿Qué sitios web me recomienda?
Haz cualquier otra pregunta que tengas.
Qué esperar del médico
Es probable que el proveedor de atención médica te haga preguntas, como las siguientes:
- ¿Sientes dolor al orinar?
- ¿Ves sangre en la orina solo algunas veces o todo el tiempo?
- ¿En qué momento ves sangre en la orina, cuando comienzas a orinar, hacia el final del flujo de orina o durante toda la micción?
- ¿Ves también coágulos de sangre cuando orinas? ¿Qué tamaño y forma tienen?
- ¿Fumas?
- ¿Estás expuesto a sustancias químicas en el trabajo? ¿De qué clase?
- ¿Has recibido radioterapia?
© 1998-2024 Fundación Mayo para la Educación y la Investigación Médicas (MFMER, por sus siglas en inglés). Todos los derechos reservados.
Terms of Use