Análisis de fosfatasa alcalina en sangre
Un análisis de fosfatasa alcalina en sangre verifica la salud de tu hígado, huesos y otras áreas del cuerpo. Conoce cuándo se hace la prueba, cómo prepararte y qué significan los resultados.
Perspectiva general
Un análisis de sangre de fosfatasa alcalina es una prueba sencilla para comprobar la salud de los huesos, el hígado y otras partes del cuerpo.
La fosfatasa alcalina es una enzima, es decir, un tipo de proteína. Se produce principalmente en el hígado y los huesos. No obstante, también se encuentra en los riñones y el intestino. Durante el embarazo, el órgano que se forma para ayudar a alimentar y darle oxígeno al bebé también produce fosfatasa alcalina. Ese órgano es la placenta.
Un análisis de fosfatasa alcalina no suele realizarse sin otras pruebas. A menudo, se incluye en un grupo de análisis llamado perfil hepático o análisis de la función hepática. En estos análisis, se busca saber si hay otras sustancias relacionadas con la salud hepática, como las siguientes:
- Alanina transaminasa
- Aspartato aminotransferasa
Tipos
Existen dos tipos principales de análisis de sangre de fosfatasa alcalina.
- Análisis estándar de fosfatasa alcalina. Este análisis de sangre muestra la cantidad total de fosfatasa alcalina en todas las partes del cuerpo.
- Análisis isoenzimático de fosfatasa alcalina. También conocido como análisis de fraccionamiento de fosfatasa alcalina, este análisis de sangre muestra de dónde viene la fosfatasa alcalina, como de los huesos o el hígado. Puede hacerse si el resultado de una prueba estándar de fosfatasa alcalina es demasiado alto o demasiado bajo. El análisis puede no estar disponible en todos los centros médicos.
El análisis isoenzimático de fosfatasa alcalina se agrupa según la zona corporal que se analiza.
- Fosfatasa alcalina ósea. Las células formadoras de huesos del cuerpo producen fosfatasa alcalina. Los niveles de fosfatasa alcalina ósea pueden aumentar cuando los huesos reciben algún daño, están en recuperación o están en crecimiento.
- Fosfatasa alcalina hepática. Las células hepáticas, en especial las que revisten el conducto biliar, producen fosfatasa alcalina. Los niveles de fosfatasa alcalina pueden aumentar si el hígado está enfermo o duele.
Por qué se debe hacer
Un análisis de sangre de fosfatasa alcalina, también conocido como análisis de fosfatasa alcalina, se suele realizar como parte de un análisis de sangre de rutina para revisar tu salud general.
El equipo de atención médica puede pedir un análisis de fosfatasa alcalina si tienes síntomas de enfermedad hepática u ósea. También se puede realizar si tienes problemas intestinales o en la glándula paratiroides.
Es posible que necesites un análisis de fosfatasa alcalina si tienes síntomas como los siguientes:
- Cansancio sin causa aparente
- Náuseas
- Dolor en la parte superior del abdomen
- Color amarillento en la piel o en la parte blanca de los ojos
- Dolor en los huesos
- Fracturas frecuentes de huesos o cambios en su forma
Las afecciones hepáticas que un análisis de fosfatasa alcalina puede ayudar a diagnosticar incluyen las siguientes:
- Obstrucción del conducto biliar
- Cáncer de hígado o cáncer que se ha diseminado hasta el hígado
- Insuficiencia hepática
- Hinchazón del hígado
- Enfermedades hepáticas como la hepatitis y la cirrosis
Las afecciones óseas que un análisis de fosfatasa alcalina puede ayudar a diagnosticar incluyen las siguientes:
- Cáncer de hueso o cáncer que se ha diseminado hasta los huesos
- Enfermedades óseas como la enfermedad ósea de Paget y la osteomalacia
- Una afección genética poco común llamada hipofosfatemia, que hace que los huesos y los dientes estén muy frágiles
El análisis de fosfatasa alcalina no se usa para diagnosticar osteoporosis, que es una afección caracterizada por huesos frágiles y quebradizos.
Un análisis de fosfatasa alcalina también se puede hacer para saber si tienes:
- Linfoma de Hodgkin, que es un tipo de cáncer
- Enfermedad inflamatoria intestinal, incluida la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa
- Malnutrición, que es poca cantidad de los nutrientes que el cuerpo necesita para estar sano
- Vitamina C en exceso
- Glándula paratiroides hiperactiva
- Glándula tiroides hipoactiva
El análisis de fosfatasa alcalina también se puede hacer para ver si funcionan los tratamientos para la enfermedad hepática, ósea u otra afección.
Riesgos
El análisis de sangre de fosfatasa alcalina presenta muy poco riesgo. Al igual que con cualquier análisis de sangre, entre los posibles riesgos se incluyen los siguientes:
- Molestia o sensibilidad en la zona donde se sacó sangre.
- Hematoma cerca de la zona donde se sacó sangre.
- Sangrado.
- Desmayo o sensación de aturdimiento.
- Infección en la zona donde se sacó sangre. Esto es poco frecuente.
Cómo prepararte
La mayoría de las personas no necesita hacer nada en especial a fin de prepararse para un análisis de sangre de fosfatasa alcalina, o análisis de fosfatasa alcalina. Sin embargo, a continuación, se presentan algunos aspectos útiles para tener en cuenta:
- Medicamentos. Algunos medicamentos y suplementos pueden afectar el nivel de fosfatasa alcalina. Informa a tu equipo de atención médica de todos los medicamentos y los suplementos que tomes. incluidos los que compras sin receta médica.
- Alimentos y bebidas. Comer una comida abundante justo antes del análisis puede causar un aumento breve y pequeño de la fosfatasa alcalina. Por lo tanto, es posible que te digan que no comas ni bebas por un rato antes del análisis, en especial si deben realizarte otros análisis de sangre. Pregunta al equipo de atención médica si debes dejar de comer o beber por un rato antes del análisis de fosfatasa alcalina.
- Alcohol. No bebas alcohol durante al menos 24 horas antes del análisis. Beber alcohol con regularidad puede aumentar el nivel de fosfatasa alcalina.
- Hábito de fumar. De acuerdo con algunas investigaciones, fumar puede hacer que la fosfatasa alcalina ósea aumente. Pero se necesita más investigación. Pregunta al equipo de atención médica si debes dejar de fumar antes de un análisis de fosfatasa alcalina.
- Hacer ejercicio. El ejercicio intenso puede aumentar la fosfatasa alcalina. El equipo de atención médica puede pedirte que no vayas al gimnasio y que no entrenes antes del análisis de fosfatasa alcalina.
Lo que puedes esperar
Antes
Un análisis de sangre de fosfatasa alcalina se realiza en un consultorio médico, una clínica, un laboratorio o un hospital. Existen algunas pruebas caseras para verificar la salud del hígado, que pueden incluir una prueba de fosfatasa alcalina. Sin embargo, estas pruebas no siempre están disponibles en muchos lugares. No existe ningún análisis isoenzimático de fosfatasa alcalina para hacer en casa.
Si las agujas te dan ansiedad o si te has desmayado durante un análisis de sangre, infórmalo al equipo de atención médica. También infórmale al equipo si tienes un trastorno de sangrado.
Durante
Se necesita una pequeña muestra de sangre para un análisis de fosfatasa alcalina en sangre. El análisis solo demora unos minutos y puede sentirse como un pequeño pellizco.
Para hacer el análisis, el profesional de atención médica:
- Limpia la piel con alcohol.
- Utiliza una pequeña aguja para extraer sangre de una vena, generalmente en el brazo.
- Pone una venda para evitar el sangrado.
Después
Podrías presentar un pequeño moretón o sentir inflamación donde se insertó la aguja. Suele desaparecer en uno o dos días. Por lo general, puedes reanudar tus actividades diarias de inmediato.
Resultados
El equipo de atención médica te dará el resultado del análisis. La mayoría de las personas recibe el resultado del análisis de fosfatasa alcalina en aproximadamente 1 o 2 días.
Cuando analices el resultado del análisis de fosfatasa alcalina, ten en cuenta lo siguiente:
- Los pequeños cambios en el nivel de fosfatasa alcalina son comunes y, por lo general, no son preocupantes.
- Un resultado del análisis por sí solo no lo dice todo. El equipo de atención médica analiza los cambios en el nivel de fosfatasa alcalina a lo largo del tiempo.
- El ejercicio, lo que comes y el estrés pueden aumentar o disminuir un poco el nivel de fosfatasa alcalina.
El resultado de un análisis de sangre estándar de fosfatasa alcalina se proporciona en unidades por litro (U/l). Un intervalo de fosfatasa alcalina saludable es el siguiente:
- Para los hombres mayores de 19 años: de 40 a 129 U/l
- Para las mujeres mayores de 17 años: de 35 a 104 U/l
Los niños y adolescentes suelen tener niveles más altos de fosfatasa alcalina debido al crecimiento de los huesos. Los niveles de fosfatasa alcalina también aumentan durante el embarazo.
No hay un intervalo estándar para los resultados del análisis isoenzimático de fosfatasa alcalina en jóvenes. Para los adultos mayores de 18 años, el siguiente es un intervalo saludable:
- Isoenzima de fosfatasa alcalina hepática: de 15,8 a 71,9 U/l
- Isoenzima de fosfatasa alcalina ósea: de 12 a 56,7 U/l
- Isoenzima de fosfatasa alcalina intestinal: inferior o igual a 12,6 U/l
Nota: Los intervalos de laboratorio pueden diferir según el laboratorio que haga el análisis. Pregúntale al profesional de atención médica cuál es el nivel de fosfatasa alcalina objetivo para ti.
Fosfatasa alcalina muy alta
El nivel de fosfatasa alcalina se considera muy elevado si es más de cuatro veces el límite superior del intervalo. Por lo tanto, si el límite superior es de 129 U/l, un nivel muy elevado de fosfatasa alcalina sería de aproximadamente 500 U/l.
Un conducto biliar completamente obstruido puede elevar los niveles de fosfatasa alcalina hasta 10 veces el límite superior. Si el nivel de fosfatasa alcalina es muy alto, se necesitan más análisis y un tratamiento de inmediato.
Causas de un nivel alto de fosfatasa alcalina
Entre las afecciones hepáticas que pueden causar un nivel alto de fosfatasa alcalina, se incluyen las siguientes:
- Obstrucción de los conductos biliares
- Cáncer de hígado o cáncer que se ha diseminado hasta el hígado
- Enfermedad hepática inducida por medicamentos, que es daño hepático debido a medicamentos, plantas medicinales o suplementos
- Enfermedad hepática, que incluye cirrosis y enfermedad hepática esteatósica relacionada con la disfunción metabólica, anteriormente conocida como enfermedad hepática de hígado graso no alcohólico
- Rechazo de órganos, que es una complicación del trasplante de hígado
Entre las afecciones óseas que pueden causar un nivel alto de fosfatasa alcalina, se incluyen las siguientes:
- Cáncer de hueso
- Enfermedad ósea como la enfermedad ósea de Paget y la osteomalacia
- Huesos rotos en proceso de cicatrización
- Mieloma, que es el cáncer de médula ósea
Los siguientes son otros factores que pueden aumentar los niveles de fosfatasa alcalina:
- Insuficiencia cardíaca congestiva.
- Enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa
- Linfoma de Hodgkin.
- Septicemia, que es una insuficiencia orgánica que pone en riesgo la vida debido a una infección
- Hiperparatiroidismo, que es una glándula paratiroides hiperactiva
- Una infección intraabdominal, que es una infección bacteriana grave dentro del abdomen.
Los niveles de fosfatasa alcalina también aumentan durante el embarazo, en especial en el último trimestre. Esto es normal y no suele ser motivo de preocupación.
Causas de un nivel bajo de fosfatasa alcalina
Las causas de un nivel bajo de fosfatasa alcalina pueden ser las siguientes:
- Malnutrición, que es la falta de vitaminas, minerales y proteínas que el cuerpo necesita
- Vitamina C en exceso
- Falta de zinc o magnesio
- Hipofosfatemia, una afección genética poco común
- Tiroides hipofuncionante, que se conoce como hipotiroidismo
Si el nivel de fosfatasa alcalina está fuera del intervalo, el equipo de atención médica puede hacer lo siguiente:
- Repetir el análisis en unas semanas o meses
- Pedir otros análisis de sangre o estudios por imágenes, como una tomografía computarizada, una resonancia magnética o una gammagrafía ósea
- Hablar contigo acerca de los medicamentos que tomas y la cantidad de alcohol que bebes
- Remitirte a un especialista hepático u óseo, de ser necesario
Una vez que se determine la causa de un nivel alto o bajo de fosfatasa alcalina, el equipo de atención médica hablará contigo acerca de los posibles tratamientos. Si tienes dudas sobre el resultado del análisis o qué hacer a continuación, habla con el profesional de atención médica.
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